Página 34

Al terminar de decir esto y sin esperar respuesta alguna de Tadeo, se acomodó con el resto del grupo, donde algunos lo observaron con enojo.

Tadeo se quedó de pie mirándolo, entre lleno de odio y paralizado.
Acababan de darle su segunda desaprobación, sin motivo alguno y aún faltaban dos devoluciones. Su esperanza de aprobar el examen cayó por los suelos.
Tenía ganas de gritarle, de golpearlo, de quemarlo vivo. ¿Quién se creía ese idiota para descalificarlo sin probarlo ni decirle por qué lo hacía?
Tadeo se dio cuenta que tenía los puños y la mandíbula apretada. También notó que Laura lo miraba y meneaba suavemente la cabeza, formando un sutil "no".
Trató de relajarse entonces, nada bueno vendría de un berrinche a estas alturas. Y la Manipuladora trataba de advertírselo.

Entonces Walter dio un paso adelante.

- Te felicito Tadeo. Primero voy a decirte que te apruebo; ahora voy a explicarte por qué.

Tadeo suspiró de alivio.

- Es innegable que tu desempeño conmigo fue... Poco fructífero por así decirlo.
Tampoco puedo negar tus dificultades con Laura, tu descontrol con Juan o tu desconocimiento cultural.
Pero no fue eso lo que me llamó la atención de vos en este examen Tadeo, sino tu nobleza. Te negaste a lastimar a alguien que creías indefenso. No intentaste hacer abuso de tu poder y no iniciaste tu ataque hasta no estar seguro de que no lastimarías a ninguno de nosotros.
Tu nobleza dejó una huella en mi, por la cual te agradezco. Esa nobleza, se ganó mi aprobación.
Espero el día de mañana escuchar grandes cosas tuyas y si me permitís un último consejo; practicá mucho el control de fuego ajeno y por supuesto, tu problema de nervios.
Nuevamente, te doy mis felicitaciones.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario